Respondemos con esta entrada a la petición expresa de presentar una técnica sencilla para mirar la Revolución francesa con las gafas ecosociales. En realidad, una revolución ya lleva de por sí la impronta ecosocial en lo que significa de intento de liberación humana más o menos exitoso o acertado. Por ello, el ejercicio que presentamos realmente es de comprensión de estos hechos históricos centrales.
Ficha técnica
Objetivos
Al finalizar la técnica, el alumnado:
- Conocerá los tres principales objetivos de la Revolución francesa y quienes los persiguieron.
- Conocerá el fracaso relativo de los movimientos populares.
- Valorará la influencia americana en la gestación de la Revolución francesa.
Curso: 4º ESO y 1º de Bachillerato.
Asignaturas: Historia.
Temporalización: Dos sesiones.
Desarrollo
La secuencia formativa propuesta es la siguiente:
- Formar equipos de 4-5 personas.
- Leer el texto que se adjunta.
- Explicar todos los términos en cursiva.
- Realizar una pequeña biografía (1-2 párrafos) de los personajes que aparecen nombrados.
- Ilustrar el texto con las imágenes que se proponen y, al menos, otras dos nuevas que el grupo tendrá que buscar. Es probable que tengan que buscar algo de información de los hechos que aparecen en alguna de ellas.
- Realizar un esquema que sintetice lo que habéis aprendido.
Texto
Objetivos de la Revolución francesa
La Revolución francesa persiguió tres cosas muy diferentes, pero todas ellas profundamente entrelazadas:
- La puesta en marcha de reformas en el Estado francés con el fin de pudiese competir con Gran Bretaña por la hegemonía mundial reforzando el sistema capitalista en Francia. Esto lo persiguió de manera relativamente consciente un grupo diverso de las clases capitalistas francesas. Cuando Napoleón terminó haciéndose con el poder fue cuando se desarrollaron fundamentalmente estas reformas.
- El intento popular, mayoritariamente campesino, de derribar el orden político (Antiguo régimen) y económico (capitalismo) establecido. Fue un movimiento antisistémico. La revuelta fue popular, y cuando consiguió tomar las estructuras del Estado, usó sus medios represivos.
- El derrumbe final de la ideología feudal, que ya llevaba desgastándose desde el siglo XVI.
Por lo tanto, el alzamiento campesino no fue el único detonante de la revolución, también lo fueron las luchas intercapitalistas, pero sí fue clave. Se había labrado durante el siglo XVIII en las movilizaciones del campesinado en defensa de sus derechos de acceso a tierras comunales. Estas luchas se incrementaron por la dificultad de acceso a alimentos1. Robespierre ejemplificó el lado antisistémico de la Revolución: criticó la monarquía, denunció el colonialismo francés de ultramar, se opuso al sufragio censatario2, condenó la acumulación especulativa de la propiedad y defendió la ampliación de los derechos políticos y sociales de las clases populares.
Los resultados de la Revolución francesa
Los movimientos antisistémicos fracasaron en su principales objetivos, pues al final no hubo una transformación básica ni económica ni política3, aunque el campesinado francés también consiguió retener y arrancar derechos4. El capitalismo, que venía desarrollándose desde el siglo XV, alcanzó la madurez gracias a la derrota de los movimientos populares en la Revolución francesa.
Sin embargo, paradójicamente esta revolución sí consiguió imprimir en el imaginario colectivo moderno que la población organizada es capaz de generar fuertes cambios sociales. También marcó la senda de la lucha por los derechos de ciudadanía a través de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano (entre ellos, el derecho a resistirse al poder absoluto), de los que quedaron excluidas las mujeres, a pesar de desempeñar un papel fundamental en la Revolución. De esta forma, los ecos de la Revolución francesa resonarían en el espacio (independencia de América) y en el tiempo (movimiento obrero).
Inspiraciones para la Revolución francesa
La Revolución francesa es hija de las luchas sociales europeas, pero también debe mucho de lo que sucedió en América. Las luchas sociales en Europa, entre las que destacó la Revolución francesa, se vieron fuertemente influidas por el conocimiento de los pueblos sin Estado americanos. Al imaginario europeo llegaron referencias de poblaciones igualitarias con un funcionamiento comunitario que vivían en armonía con su entorno. A pesar de que los órganos de poder realizaron una fuerte campaña de deshumanización de estas poblaciones caricaturizándolas como salvajes, su encanto no pasó desapercibido. Por ejemplo, la Revolución americana que terminó con la creación de EEUU tuvo claras ascendencias de la Liga de las Cinco Naciones Iroquesas5. Este modelo político influyó en los postulados de personajes como Jefferson, Franklin o Rousseau. En este trasiego de ideas, pero también de luchas, los marineros y piratas6 desempeñaron un papel central uniendo las dos orillas del Atlántico.
En la América indígena, además se produjeron amplias revueltas en el siglo XVIII, como las lideradas por Túpac Amaru, Túpac Katari, Micaela Bastidas o Bartolina Sisa, que entroncaron con el ciclo de revueltas de las décadas de 1730 y 1740. Finalmente, entre 1776 y 1825 la mayoría de las colonias europeas en América se independizaron. La primera de todas fue EEUU, en una revolución que nació de revueltas populares, pero que terminó siendo dirigida por las clases más pudientes. Este hecho produjo una fuerte influencia en la Revolución francesa.
Notas
1El precio del trigo subió el 88% después de dos malas cosechas consecutivas.
2El sufragio censatario solo otorgó el derecho al voto a la parte de la población que contaba con ciertas características (renta mínima y sexo masculino, fundamentalmente).
3Tras la ejecución de Robespierre y Saint-Just, se produjo una represión encarnizada de los movimientos populares y la Constitución de 1795 reintrodujo el sufragio censatario, rebajó el alcance de los derechos civiles y blindó la propiedad privada.
4Por ejemplo, la servidumbre fue finalmente abolida, la aristocracia y el clero perdieron para siempre sus privilegios legales, y se retrasaron e incluso revirtieron los proceso de privatización de tierras comunales.
5Su funcionamiento estaba basado en el consenso y no existían mecanismos de sometimiento, sino que el seguimiento de los acuerdos era fundamentalmente voluntario. El Gran Consejo de la Confederación Iroquesa estaba formado por cincuenta jefes civiles (no militares). El derecho de proponer a los jefes (y de destituirlos) lo ostentaban las madres de clan.
6En el siglo XVIII, la piratería fue en gran parte una forma de liberación democrática e igualitaria de marineros.
Imágenes