El 21 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Paz establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1981.
Desde nuestro blog “Tiempo de Actuar” queremos celebrar ese día presentando un recurso titulado: ¡Discrepancia bienvenida!: Guía pedagógica para el diálogo controvertido en el aula, elaborado por Marina Caireta y Cecile Barbeito, para la Escuela de Cultura de Paz de la Universidad Autónoma de Barcelona.
El aumento de la diversidad, el incremento de la sensibilidad hacia temas identitarios, la facilidad de acceso a redes sociales o la multiplicación de fuentes de información poco rigurosas, hace que los y las jóvenes estén más expuestos a las controversias.
El espacio educativo es, seguramente, uno de los espacios más idóneos para ayudarles a comprender y reflexionar críticamente sobre estas temáticas: por un lado, porque suele ser más plural que la familia; por otro, porque es un espacio de confianza y respeto, y por último, porque el currículo recoge las competencias vinculadas al tratamiento de temas controvertidos. Sin embargo,
¿Es posible hacerlo sin buscarse problemas como docente?
¿Cómo hacerlo de forma que desarrolle el propio criterio del alumnado y permita la comprensión del otro?
OBJETIVO GENERAL:
La guía que proponemos tiene como objetivo principal aportar herramientas al profesorado para animarle a dinamizar diálogos controvertidos en el aula.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
• Reflexionar sobre riesgos y oportunidades de educar en la controversia.
• Aportar herramientas y actividades diseñadas para tratar temas controvertidos desde un contexto de seguridad y aprendizaje.
• Capacitar al profesorado para trabajar temas controvertidos en el aula.
• Adaptar metodologías y herramientas de educación en la controversia entre las partes en el propio contexto.
Los temas controvertidos se pueden abordar de muchas maneras en el aula: con diferentes objetivos, enfoques, metodologías, técnicas y niveles.
Desde una perspectiva de educación para la paz, hay que trabajar por la cohesión social y la prevención de la polarización y, por lo tanto, hay que aprender cómo abordar los temas controvertidos para convertirlos en una oportunidad en lugar de amplificar su dificultad. En efecto, la mejor manera de transformar los conflictos es abordándolos de la forma lo más directa y respetuosa posible, y los diálogos sobre temas controvertidos permiten además desarrollar muchas habilidades necesarias para la resolución de conflictos.
Los temas controvertidos son oportunidades educativas para dotar a niños, niñas y jóvenes de los recursos necesarios para convivir en la pluralidad y desarrollar la ciudadanía democrática.
Educar para la controversia nos abre oportunidades sustanciales para prevenir la polarización social y el extremismo violento, ya que expone al alumnado a diferentes puntos de vista y a la complejidad de la vida moderna: permite generar aprendizajes a partir de la confrontación no violenta de opiniones diversas, ayuda a romper estereotipos y a valorar la diferencia.
Es importante ayudar al alumnado a desarrollar una conciencia planetaria, entender las conexiones e interdependencias que conforman la comunidad global a la que pertenecen y formarse como ciudadanía responsable en su contexto local-global. Para llevar a cabo una educación para la ciudadanía global, el tratamiento de temas controvertidos es un recurso clave.
Aunque a menudo se asocia la controversia al debate, desde el planteamiento de la guía, coherente con la educación para la paz, el abordaje de temas controvertidos busca más el diálogo que el debate.
En conclusión, abordar temas controvertidos no debería servir sólo para fomentar el debate (capacidad retórica), sino sobre todo para fomentar el diálogo (que implica la conciencia de los propios valores y la comprensión de los valores de la otra persona). Así, lo que se busca no es sólo que el alumnado sepa argumentar una opinión contrastada, sino que sepa escuchar y ser empático.
El enfoque del diálogo pone el énfasis en que el objetivo final de un debate no debería ser saber qué bando ha conseguido ganar la discusión con mejores argumentos, ni qué bando tiene más razón que el otro, sino que todos y todas las participantes expandan su visión sobre el tema abordado sin necesidad de terminar compartiendo la opinión.
El texto se organiza en 12 apartados y una bibliografía final.
1. Presentación.
2. ¿Por qué, para qué y cómo plantear diálogos controvertidos?
3. Competencias del alumnado:
Respeto
Gestionar las emociones de forma noviolenta
Empatizar y escuchar activamente
Expresarse de forma asertiva
Situar las percepciones y valorar los diversos puntos de vista
Análisis crítico de la información
Oratoria
Complejidad y tolerancia a la ambigüedad
Coherencia y compromiso
4. El posicionamiento del profesorado.
5. ¿Qué contexto crear?
6. Prevenir los riesgos.
7. Metodologías.
8. Abordar las controversias como opción de centro.
9. Evaluación.
10. Compilación de Actividades.
11. Anexos
Bibliografía
La guía ofrece 26 actividades para introducir y dinamizar controversias en el grupo y para promover una pedagogía de la duda, de la comprensión, del pensamiento crítico, de la complejidad y del aprecio a la diversidad, que facilite a la comunidad educativa el tratamiento de temas controvertidos en el aula y en otros espacios educativos.
Cada actividad hace algunas recomendaciones sobre la edad aconsejada, sus objetivos, tiempo de realización y materiales necesarios para llevarla a cabo.
A continuación, ofrecemos algunas de ellas, aunque acediendo a la guía es posible consultar todas las demás.
Actividad 2: Miradas
Vídeo “Mirando a los ojos de los Refugiados” (3’45 ‘’) Amnistía Internacional.
Actividad 13: Escucha Activa